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Capellan (CPT) Eric M. Miletti
Prof. Miletti en plena trasmision radial
Programa 9 Nov. 2008 - Masoneria en PR
Programa 2 Nov. 2008 - Politica y Religion III
Programa 26 Octubre 2008 - Espiritismo y Yoga II
Programa 19 Octubre 2008 - Espiritismo y Yoga
Programa 12 Oct. 2008 Filosofia Hermetica
Programa 5 Oct. 2008 Iglesia y Estado
Programa 28 Sept. 2008 Conjuros Secretos en el Palo; Brujeria en Puerto Rico
Programa 21 Sept 2008 Paganismo en Puerto Rico
Programa 21 Sept. 2008 Cienciologia; que es y que hacen?
Prof. Miletti y Jay Fonseca, reportero de Red 96.5 FM
Los exelentes tecnicos de Red 96.5 FM
Analisis de La Musica Religiosa en Puerto Rico
Según el investigador religioso Eric M. Miletti-Gonzalez, la música religiosa llena dos espacios: Entretenimiento y Esperanza.
Lunes 24 de Mayo de 2004-Puerto Rico
(NoticiaCristiana.com) San Juan, Puerto Rico, (Primera Hora/¡Amén-Amén!) El impulso de la música religiosa en el ámbito cristiano y secular es un síntoma de la posmodernidad, según el investigador religioso Eric M. Miletti-Gonzalez. Y eso provoca, entre otras cosas, que la gente ponga su fe en nuevos espacios, incluidos los intérpretes de este estilo musical."La posmodernidad no es otra cosa que lo que eran antes espacios sagrados, ahora se diversifican. Así que la música encuentra nuevos espacios y la música cristiana ya no se limita a la Iglesia", precisó el experto en fenómenos religiosos y culturales."
La religiosidad tradicional no está contestando la necesidad de la gente. Tal vez por los mismos cambios que estamos enfrentando como sociedad posmoderna, así que estos espacios nuevos le brindan a la gente la oportunidad de acercarse a su interioridad, a lo religioso o a lo espiritual sin tener que adecuarse a lo tradicional", abundó. Tal inconformidad sumada a la pérdida de confianza en las instituciones entre la gente ha motivado el desarrollo de otros modelos." La gente ha perdido la fe en las instituciones, en la iglesia, en la política, pero Occidente ha sido enseñado a tener fe por tradición. De hecho, el ser humano en general no puede vivir sin ese principio de esperanza", declaró Miletti, miembro de la iglesia protestante.
El padre Pedro Ortiz, de la parroquia La Providencia en Caguas, concurre en que existe una "carencia de modelos de referencia adecuado" y de eso resurge un individuo con una fe más intimista." Cuando se hace una reducción a una fe intimista, pierdes el disernimiento religioso-social sobre tu entorno y la canción te enajena de la realidad que vives y Dios no quiere eso", subrayó el activista católico con relación a idolatría que se genera en torno a los artistas cristianos. "No veo mal el resurgimiento de grupos y cantantes cristianos. Creo que es algo tremendamente necesario para el mundo, pero, quizás, debemos tener en cuenta que hay que buscar un balance en el cómo promovemos la fe a través de la música sacra, porque el proselitismo religioso está constante", opinó Ortiz."
¿Y dónde la gente pone la fe?", preguntó Miletti. "Cuando el merengue y la salsa han perdido validez, el hip hop es de un grupo específico, aparece la música religiosa y llena dos espacios: uno, el espacio del entretenimiento y otro, el de esperanza. Es como tener un Disney World donde se hable de espiritualidad", opinó.
Para Miletti, el éxito de los vocalistas cristianos arrastra múltiples conflictos, entre éstos, el creerse Dios. "Uno de los problemas es la diosificación de este ser humano. Entre la gente que le grita a Ricky Martin y la gente que le grita a un cantante religioso 'x' no existe, en el sentido emocional, ninguna diferencia, porque los mensajes no son mensajes específicos, sino generales". "Cuando Ricky Martin le canta al amor, le da esperanza a la gente que tiene crisis con el amor como lo hemos tenido todos en un momento dado. Cuando Samuel Hernández le canta 'Levanto mi manos', ¿está dando un mensaje teológico claro? No. Está siendo general, así que estos mensajes generales, son mensajes donde todo el mundo y todas las situaciones aplican".
"Debo decir, como cristiano, que eso no evita que Dios actúe a través de esta gente, como no evita que Dios actúe a través de Ricky Martin o de cualquier otra persona", acotó el investigador religioso.
Otro problema que señala Miletti es la "manipulación de la emociones". "Todos somos seres emocionales y la posmodernidad ha enfatizado en lo emocional, así que si pongo una letra con la que pueda hacerte llorar, sentirte triste, que te haga pensar en tus problemas o, simplemente, nublar tu día, cualquiera ganaria muchísimo dinero, porque todo el mundo necesita esos espacios. Fíjate que 'Levanto mis manos' no tiene una reflexión teológica", remató el experto en religiones populares.
Lunes 24 de Mayo de 2004-Puerto Rico
(NoticiaCristiana.com) San Juan, Puerto Rico, (Primera Hora/¡Amén-Amén!) El impulso de la música religiosa en el ámbito cristiano y secular es un síntoma de la posmodernidad, según el investigador religioso Eric M. Miletti-Gonzalez. Y eso provoca, entre otras cosas, que la gente ponga su fe en nuevos espacios, incluidos los intérpretes de este estilo musical."La posmodernidad no es otra cosa que lo que eran antes espacios sagrados, ahora se diversifican. Así que la música encuentra nuevos espacios y la música cristiana ya no se limita a la Iglesia", precisó el experto en fenómenos religiosos y culturales."
La religiosidad tradicional no está contestando la necesidad de la gente. Tal vez por los mismos cambios que estamos enfrentando como sociedad posmoderna, así que estos espacios nuevos le brindan a la gente la oportunidad de acercarse a su interioridad, a lo religioso o a lo espiritual sin tener que adecuarse a lo tradicional", abundó. Tal inconformidad sumada a la pérdida de confianza en las instituciones entre la gente ha motivado el desarrollo de otros modelos." La gente ha perdido la fe en las instituciones, en la iglesia, en la política, pero Occidente ha sido enseñado a tener fe por tradición. De hecho, el ser humano en general no puede vivir sin ese principio de esperanza", declaró Miletti, miembro de la iglesia protestante.
El padre Pedro Ortiz, de la parroquia La Providencia en Caguas, concurre en que existe una "carencia de modelos de referencia adecuado" y de eso resurge un individuo con una fe más intimista." Cuando se hace una reducción a una fe intimista, pierdes el disernimiento religioso-social sobre tu entorno y la canción te enajena de la realidad que vives y Dios no quiere eso", subrayó el activista católico con relación a idolatría que se genera en torno a los artistas cristianos. "No veo mal el resurgimiento de grupos y cantantes cristianos. Creo que es algo tremendamente necesario para el mundo, pero, quizás, debemos tener en cuenta que hay que buscar un balance en el cómo promovemos la fe a través de la música sacra, porque el proselitismo religioso está constante", opinó Ortiz."
¿Y dónde la gente pone la fe?", preguntó Miletti. "Cuando el merengue y la salsa han perdido validez, el hip hop es de un grupo específico, aparece la música religiosa y llena dos espacios: uno, el espacio del entretenimiento y otro, el de esperanza. Es como tener un Disney World donde se hable de espiritualidad", opinó.
Para Miletti, el éxito de los vocalistas cristianos arrastra múltiples conflictos, entre éstos, el creerse Dios. "Uno de los problemas es la diosificación de este ser humano. Entre la gente que le grita a Ricky Martin y la gente que le grita a un cantante religioso 'x' no existe, en el sentido emocional, ninguna diferencia, porque los mensajes no son mensajes específicos, sino generales". "Cuando Ricky Martin le canta al amor, le da esperanza a la gente que tiene crisis con el amor como lo hemos tenido todos en un momento dado. Cuando Samuel Hernández le canta 'Levanto mi manos', ¿está dando un mensaje teológico claro? No. Está siendo general, así que estos mensajes generales, son mensajes donde todo el mundo y todas las situaciones aplican".
"Debo decir, como cristiano, que eso no evita que Dios actúe a través de esta gente, como no evita que Dios actúe a través de Ricky Martin o de cualquier otra persona", acotó el investigador religioso.
Otro problema que señala Miletti es la "manipulación de la emociones". "Todos somos seres emocionales y la posmodernidad ha enfatizado en lo emocional, así que si pongo una letra con la que pueda hacerte llorar, sentirte triste, que te haga pensar en tus problemas o, simplemente, nublar tu día, cualquiera ganaria muchísimo dinero, porque todo el mundo necesita esos espacios. Fíjate que 'Levanto mis manos' no tiene una reflexión teológica", remató el experto en religiones populares.
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